A LA MEMORIA DE MI MADRE
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Gracias, madre, por tus horas,
tus días, tus noches en duras jornadas
de crianza de tus cuatro hijos;
por tu dedicación,
por tu fortaleza en la vida,
porque desde pequeña,
has sido una gran luchadora
en este mundo
de durezas y dificultades.
Con pocos años aún,
te arrebataron el padre,
quitándole lo más preciado:
Con pocos años aún,
te arrebataron el padre,
quitándole lo más preciado:
la vida,
asesinándolo
por pensar distinto
y defender la Libertad
y la Democracia;
¡sí!,
lo hicieron unos canallas sin piedad.
Te dejaron huérfana
no sólo a ti, sino a cinco más
de tus hermanos.
Y a tu madre, la convirtieron
en una mujer viuda y endurecida,
amargada, enloquecida
por el dolor.
A todos os hicieron la vida muy difícil,
muy dura… muy amarga.
Y cada uno de vosotros trabajó
donde, y como pudo,
para poder comer y subsistir
en unos años tan difíciles
como fueron aquellos de la guerra,
y los que siguieron después.
Desde el día uno de octubre,
ya descansas de los sufrimientos,
de la enfermedad.
No sé muy bien dónde,
pero ya descansas;
en la paz de Dios,
del Cosmos infinito
donde moran las almas…
o donde sea:
pero ya descansas, madre.
Gracias, y desde estas letras,
te mando un beso:
Uno más.
Ya ves que es muy poco
lo que te doy,
si lo comparas con
lo que de ti, he recibido.
asesinándolo
por pensar distinto
y defender la Libertad
y la Democracia;
¡sí!,
lo hicieron unos canallas sin piedad.
Te dejaron huérfana
no sólo a ti, sino a cinco más
de tus hermanos.
Y a tu madre, la convirtieron
en una mujer viuda y endurecida,
amargada, enloquecida
por el dolor.
A todos os hicieron la vida muy difícil,
muy dura… muy amarga.
Y cada uno de vosotros trabajó
donde, y como pudo,
para poder comer y subsistir
en unos años tan difíciles
como fueron aquellos de la guerra,
y los que siguieron después.
Desde el día uno de octubre,
ya descansas de los sufrimientos,
de la enfermedad.
No sé muy bien dónde,
pero ya descansas;
en la paz de Dios,
del Cosmos infinito
donde moran las almas…
o donde sea:
pero ya descansas, madre.
Gracias, y desde estas letras,
te mando un beso:
Uno más.
Ya ves que es muy poco
lo que te doy,
si lo comparas con
lo que de ti, he recibido.
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Antonio, conmovedor, ejemplo a seguir para muchos hijos que a sus padres en sus últimos años los dejan abandonados. Desde aquí mi pesar.
ResponderEliminarque bonito.. llega al corazón. un besito papá.
ResponderEliminarQué hermoso escribís! y qué ejemplo tu poema. Un abrazo. Magda
ResponderEliminarPreciso y precioso, sentido y vivido. Enhorabuena.
ResponderEliminarAntonio, tus palabras mueven el corazón. Buenas tardes, solo decirte que aunque suene banal un "pesame", y sin pasar aun por la perdida de un ser tan querido; te envio un abrazo de condolencia.
ResponderEliminartus palabras hablan de la vida, del amor y de la entrega... entrega por una mujer dada a los suyos y para los suyos. a vosotros -sus familiares- os queda la grandeza que atesora el haber compartido con ella la vida y el amor. Ese amor puro y bien relaizadop a traves de los minutos y las horas de toda una vida. Ese amor sin trazos de medias tintas, que será escrito con letras de oro en el libro d ela vida. Eso nos queda, el amor. Las cosas de la tierra en la tierra quedarán, nadie se llevara nada. Solo el amor quedará y los nombres de sus protagonistas se perpetuarán por los siglos de los siglos.
¡mucho animo! adios.
floren
Estimado amigo, tu poema me llegó al alma, y es aquí donde me quedo muda para expresar mi sentir. Te deseo que estés bien. recibe un abrazo de esta amiga que te aprecia.
ResponderEliminarprecioso. todos nos acordamos mucho de ella. un beso.
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