EL TIEMPO EN ESTEPA

EL TIEMPO: PREVISIÓN METEOROLÓGICA PARA ESTEPA

miércoles, 23 de junio de 2010

EN SEVILLA
“AGRESIÓN A LA IMAGEN DE JESÚS DEL GRAN PODER”
__________________________________________________


Son muchas las imágenes religiosas a las que en Sevilla se les profesa culto y devoción además de un enorme cariño y respeto popular.
Pero a una de ellas, muy antigua y de las más queridas, un desafortunado incidente le ha ocurrido hace unos días.
Un hombre que al parecer tiene perturbadas sus facultades mentales, al llegar al camarín de la Basílica donde se encontraba la imagen de Jesús del Gran Poder, el “Señor de Sevilla”, comenzó a darle patadas y golpes agarrándose fuertemente al brazo derecho hasta arrancarlo de su articulación, rompiendo además partes de la camisa y la túnica del Nazareno sevillano que es venerado en su templo de la Plaza de San Lorenzo.
Por suerte, el brazo de la imagen quedó suspendido de la túnica y no llegó a caer al suelo, por lo que al parecer, el atentado no ha tenido más graves consecuencias para la talla, cuya restauración no reviste demasiada dificultad, según los expertos imagineros.
¿Por qué se hacen estas barbaridades? En este caso, porque la persona no está bien mentalmente, pues al ser reducido y detenido por dos policías de paisano que se hallaban oyendo misa en la Basílica, declaró que “él era el hijo de Dios, y traía un mensaje”.
Hemos de recordar un hecho similar a éste, cuando otro individuo con semejantes intenciones, golpeó con un partillo y rompió parte de la imagen de “La Piedad” expuesta en el Vaticano; obra maestra nacida del genio y las manos de Miguel Ángel.
De no ser por la circunstancia de la locura, ¿qué puede inducir a una persona a cometer tal atentado y agravio al Arte, a la imagen que ningún daño hace, y a la devoción popular del pueblo depositada en ellas? Afortunadamente, no abundan los actos de esta naturaleza sacrílega contra imágenes sagradas en las que muchas personas ponen su fe, esperanza y devoción más íntimas, llevando sus medallas al pecho, rezándoles en los momentos amargos de la vida, y hasta llorando al verlas en sus altares o por las calles de nuestros pueblos y ciudades en Semana Santa.
No hay derecho a cometer contra imágenes de cultos tales acciones que son más dignas de vándalos, desquiciados, gamberros y resentidos, que de personas que respetan el sentir y los sentimientos de los demás. Porque la base fundamental de la convivencia, es el respeto mutuo hacia los demás, en todos los aspectos y ámbitos de la vida, aún cuando el otro piense de distinta manera a la nuestra. Así, de esa forma, a todos nos iría mejor.

Pero como en este país, a todo se le “saca punta” y de todo “nos cahondeamos”, nos reímos y hacemos un chiste, ya ha habido alguien que de irrespetuoso e irreverente hacia los fieles del Señor del Gran Poder, se ha pasado varios pueblos en su insolencia, y ha hecho un montaje fotográfico colgado en internet (a la derecha) que de gracioso se pasa a lo irrespetuoso, llegando a rayar con lo desvergonzado, mostrándose insensible al dolor ajeno; a ese que otras personas creyentes puedan sentir por el atropellado ataque que ha sufrido la imagen a la que le piden cuando lo necesitan, le rezan cuando están tristes y sienten miedo por algún peligro, o le ruegan por la salud de un hijo, un padre, una madre o cualquier familiar que sufre alguna enfermedad, siendo esa imagen la única tabla de salvación con la que cuentan en esta vida, para llegar con la oración mediante su intercesión hasta el Dios en el que creen, para pedirle sus favores. Uno puede creer o ser ateo, agnóstico o lo que quiera ser, o creer en lo que quiera creer, y hasta no creer en nada; pero por encima de todo, ha de respetar los sentimientos y las creencias de los demás.
Pena me da de quien hizo el atentado, y pena me da quien ridiculiza al Señor de Sevilla que se aloja en los corazones y en las almas de tantos sevillanos, porque los dos son dignos del mayor de los desprecios, en el nombre de la sensibilidad y la fe de tantas personas de buen corazón y sencillez del alma, que seguro sufren por esta absurda e inútil agresión a la imagen, y a sus creencias propias. ¿Dónde están, el respeto y la vergüenza?
Se están perdiendo como muchos valores cívicos, educacionales, morales… y de otros tipos.
___________________________________________________________
Hoy viernes veinticinco, he visto en las noticias que la imagen ha sido restaurada de sus despecfectos, y ya ha sido expuesta en su Basílica para el besamanos de los fieles, a la que algunos de ellos, se acercaban con lágrimas en los ojos provocadas por el sentimiento y la emoción.

lunes, 21 de junio de 2010

"SE PRESENTA EN CORRIENTES UN NUEVO LIBRO DEL DR. ENRIQUE EDUARDO GALIANA, EN UN ACTO QUE TENDRÁ LUGAR MAÑANA MARTES 22 DE JUNIO A LAS 20:00 HORAS, EN EL AULA MAGNA DE LA FACULTAD DE DERECHO" _____________

TEMAS DE HISTORIA
...........
"SE PRESENTA EN CORRIENTES UN NUEVO LIBRO DEL DR. ENRIQUE EDUARDO GALIANA, EN UN ACTO QUE TENDRÁ LUGAR MAÑANA
MARTES 22 DE JUNIO A LAS 20:00 HORAS, EN EL AULA MAGNA DE LA FACULTAD DE DERECHO"
_____________

Mañana martes a las 20, se presenta el libro "Temas de Historia. Lecturas Complementarias de Historia de Corrientes", escrito por el Dr. Enrique Eduardo Galiana.
El acto tendrá lugar en el Aula Magna "Dr. Fernando Díaz Ulloque", de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales y Políticas de la UNNE, Salta 469. Las palabras preliminares estarán a cargo del Dr. Dardo Ramírez Braschi.


"Temas de Historia", de Moglia Ediciones, incluye en capítulos cortos, interesantes títulos para referir lo ocurrido en Corrientes y la Argentina desde antes de 1810. "El período es arbitrario; no tiene relación directa con un tiempo determinado", dice su autor, que adelanta puntualmente contenidos como la abolición de la esclavitud en Corrientes; el antisemitismo; la Constitución gaditana de 1812, entre otros.

Galiana es profesor titular de la cátedra libre "Memoria y Holocausto" de la Facultad de Derecho de la UNNE.
Ha recibido recientemente una distinción por parte del sello Moglia Ediciones, ya que su libro "Camila O'Gorman y Uladislao Gutierrez" ingresó con el ejemplar Nº 50.000 al catálogo de la firma.
Además, el Consejo Directivo y el Decanato de la Facultad de Derecho de la Unne, reconoció su labor como docente de dicha casa de estudios, con la entrega de una medalla de oro. El acto se cumplió durante la visita a Corrientes de Daniel Gazit, Embajador de Israel en la Argentina.
Se invita a participar de este nuevo lanzamiento editorial. La entrada es libre y gratuita.
_________________________________________________________
Moni Munilla
Redactora del Diario
"EL LITORAL"
de Corrientes

sábado, 19 de junio de 2010

DON LORENZO SUÁREZ DE FIGUEROA,
MAESTRE DE LA ORDEN MILITAR DE SANTIAGO,
CONSTRUCTOR DE LA TORRE DEL HOMENAJE
DEL CASTILLO DE ESTEPA



__________ (Y III) ___________


En esta tercera y última parte de la abreviada biografía del maestre don Lorenzo, seguiré relatando algunos de los aspectos más notable de su obra.
Como ya se ha dicho, ganó mediante bula Apostólica la facultad de poder testar hasta la mitad de sus bienes, y fue el primer maestre propietario que hubo en la Orden, pues hizo mayorazgo en su hijo primogénito a quien cedió las villas de Feria, Zafra y La Parra, ganadas cuando ya tuvo la dignidad de Maestre, obtenidas por merced del rey don Enrique, además de los lugares de Oliva, Valencia, Villalba y Nogales que obtuvo por la compra que de ellos hizo.
Labró también las casas y los castillos de Villalba, Oliva y La Torre de Monturque, que eran entonces, buenos y notables edificios.
Este personaje, tenido en su tiempo por un buen maestre, se casó por dos veces, teniendo un hijo varón legítimo, que como sabemos, era don Gomes Suárez de Figueroa, en quien hizo mayorazgo, que llegó a ser Mayordomo Mayor de la reina Catalina de Lancaster, que contrajo matrimonio con doña Elvira Laso de Mendoza
Además tuvo el Maestre hijas legítimas que contrajeron matrimonio con hijos de grandes del reino; su hija doña Catalina Suárez de Figueroa, casó con el marqués don Iñigo López de Mendoza, ambos, hijos de don Diego Hurtado de Mendoza.
Don Lorenzo Suárez, fue muy rico. En su casa abundaban el dinero, la plata, grandes joyas y ricos paños, sedas y granas, así como ricas tapicerías. Era propietario el Maestre de Santiago de buena cuadra donde criaba los mejores caballos y otros ganados. También poseía buenos pertrechos para sus campañas militares, como armas, tiendas y otros bastimentos.

Otro aspecto que yo desconocía de este personaje nacido en tiempos del medievo, donde sólo unos pocos privilegiados eran los que sabían leer y escribir, es que poseía en su cámara una biblioteca en la que guardaba muchos volúmenes de libros muy buenos, además de ejemplares de las crónicas de aquél tiempo.
En aquellas épocas de constantes guerras y muchos avatares, los hombres debían ser buenos jinetes, y este don Lorenzo lo era, pues sobresalía en su afición de gran montero, que salía al campo con los buenos canes de los que era amo –y debería ser muy cierta su afición y cariño a los perros, puesto que en su efigie labrada sobre el sepulcro donde están sus restos, a sus pies, aparece echado uno de esos fieles y leales animales –, y cabalgaba tanto, y era tan diestro con el caballo, que el arte ecuestre parecía serle innato, y en él que se convertía en algo natural.
Para darnos una idea de algunos rasgos del aspecto físico de don Lorenzo, las notas que he hallado sobre él, nos dicen que era un hombre grande de cuerpo y algo robusto, recio y bien apersonado.
Debía ser también una persona muy activa, que nunca estaba ociosa pues jamás dejaba tarea alguna que debiera hacerse hoy, para hacerla al día siguiente. Cualidad esta, la disciplina, de la que daba ejemplo a todos los suyos, que seguían su doctrina y tomaban buena nota, teniéndolo como ejemplo.


Y debería ser muy cierta su afición y cariño a los perros, puesto que en su efigie labrada sobre el sepulcro donde están sus restos, a sus pies, aparece echado uno de esos fieles y leales animales que parece mirar a su señor que yace muerto (Fotografía tomada de la Universidad de Sevilla)


Fue un hombre poco hablador, de escasas palabras pero de buen seso y entendimiento, de gran recogimiento y regla tanto en su casa como en su hacienda, por lo que para juicio de algunos, era tenido por escaso y codicioso; mas tenía la gran cualidad de que aquello que él daba, lo otorgaba de tal manera, que la forma suplía el efecto de la materia, porque era luego dado y en dineros contados y muy secretamente; de forma que tales actos honraban mucho los dones, de tal manera que el que lo recibía no se sentía agraviado, y el que lo daba, mostraba no querer vanagloria.
Hombre esforzado y diligente en las guerras y de buena ordenanza, que solía guiarse mucho por los consejos de los astrólogos.
Así, conquistó los castillos de Pruna, Ortegícar, Teba, Setenil, que estaban en manos de los moros, y fue Gobernador del Reino durante el tiempo de la minoría de edad del rey Enrique III, que el 28 de febrero de 1389, lo nombra primer Señor de Feria.
El final de la vida de don Lorenzo Suárez de Figueroa, llegó en febrero del año 1409, cuando contaba con sólo sesenta y cinco años de edad.
Su cuerpo, por propio mandato, fue enterrado en el Monasterio sevillano de Santiago de la Espada, que él mandó construir, y tras diversos avatares en el tiempo y en la historia, ahora reposan sus restos en el Panteón de Sevillanos ilustres, en la cripta bajo la Iglesia de la Anunciación en la ciudad de Sevilla, (fotografía de la derecha, de la página arteHistoria), donde junto al de don Lorenzo, entre otros se hallan los enterramentos de personajes sevillanos de nacimiento o de adopción, como el humanista, biólogo, escritor y consejero de Felipe II, Benito Arias Montano; don Rodrigo Ponce de León, marqués de Cádiz, muerto en agosto de 1492, distinguido caballero que estuvo en la conquista y rendición de Granada junto a los Reyes Católicos; el escritor utrerano, Rodrigo Caro, muerto el 10 de agosto de 1647; el escritor de Baena, muerto en Sevilla el día 17 de febrero de 1878; la escritora Cecilia Bölh de Faber, conocida por el pseudónimo de "Fernán Caballero", fallecida el 7 de abril de 1877; el escritor sevillano Alberto Lista, muerto en 1848; el escritor de las Rimas y Leyendas y poeta romántico Gustavo Adolfo Bécquer, y su hermano el pintor Valeriano Bécquer, muertos ambos en 1870.

Fotografía propiedad de la página de Julio Domínguez Arjona, en galeon.com

Allí, entre algunos de nuestros más ilustres personajes de la Historia, hijos de nuestra tierra, descansan para siempre los restos del buen Maestre de la Orden Militar y Religiosa de Santiago, don Lorenzo Suárez de Figueroa, llamado "El Viejo".

sábado, 12 de junio de 2010

DON LORENZO SUÁREZ DE FIGUEROA,
MAESTRE DE LA ORDEN MILITAR DE SANTIAGO,
CONSTRUCTOR DE LA TORRE DEL HOMENAJE
DEL CASTILLO DE ESTEPA
__________ ( II ) ___________
La Orden de Santiago fue una institución militar y religiosa surgida en el Reino de León, dirigida por Comendadores y Maestres, y debe su nombre al santo Apóstol Santiago el Mayor. A la derecha, podemos ver los símbolos de la Orden: la cruz en forma de espada flordelisada en empuñadura y brazos, y la concha de vieira atributo de Santiago.
El objetivo inicial de esta Orden ecuestre, era el de proteger a aquellos peregrinos que hacían el Camino de Santiago, y mantenerse en la lucha constante para hacer retroceder y expulsar a los musulmanes que habían invadido la Península ibérica adueñándose y estableciéndose en ella como en solar propio.
El caballero don Lorenzo Suárez de Figueroa de quien hablamos en esta segunda parte de su escueta biográfica, fue uno de sus destacados Maestres, del que dicen las reseñas históricas que presidió su maestrazgo pacíficamente, y ello extraña un poco, habida cuenta de los conflictos y luchas mantenidas desde siglos atrás contra los árabes, además de los problemas intestinos e intrigas entre reyes y poderosos caballeros, que amenazaban la convivencia y la vida de España.
Aparte de los árabes y las rencillas internas, por aquellos años del siglo XIV, en la época de este valeroso y esforzado Maestre, España y Portugal entraron en ofensivas bélicas a lo largo de su frontera común.
En Extremadura, tierra colindante al Oeste con el país vecino, hubo muchas entradas o incursiones en nuestro territorio llevadas a cabo por el conde don Alvar Núñez de Portugal, quien ponía en peligro los pueblos y tierras del reino de Castilla.
Pero no debió contar este conde don Alvar, con que el maestre don Lorenzo –hombre que al parecer no soportaba atropellos, y al que no se le paraban las moscas en el bigote –, solía estar la mayor parte del tiempo en sus feudos de aquellas tierras, y enfurecido por las muchas agresiones e incursiones ofensivas a nuestro suelo, determinó pagarle al conde lusitano con la misma moneda entrando con sus huestes en el reino portugués talando cuanto se ponía a su alcance, destruyendo, quemando y haciendo todo el daño que podía a los contrarios, siempre en servicio y lealtad al rey don Enrique III “el viejo”, (1390-1406).
Por causa de su probada lealtad a la corona y al rey que la ostentaba, el monarca castellano “le fizo merced de la ciudad de Ecija…, i diole las villas de Feria, i Çadra (Zafra) i Parra”.
Fue don Lorenzo “onbre de buen seso natural… mucho grangero, i allegador de facienda, asy de rentas… como por mercedes, y donos que procurava, i avía del Rey…, tenía grand cabaña de yeguas, i buenos cavallos”. Fue por tanto avezado criador de yeguas y excelentes caballos.

Situado en el tramo final de la calle San Vicente, esquina con calle Guadalquivir, era conocido como el Monasterio de Santiago de la Espada y fue fundado en 1405 por Don Lorenzo , en la que entonces se llamaba calle de Santiago de la Espada, en el barrio de San Lorenzo, de Sevilla.
La invasión francesa promovió el saqueo del convento, siendo renovado el mismo en 1816. Posteriormente, con la desamortización, el mismo pasó a ser propiedad particular, hasta que en 1893, el arzobispo Benito Sanz y Fores compró el mismo y las casas vecinas para la orden Mercedaria de la Asunción.
Su iglesia (s. XVII), que da a la calle Guadalquivir, era gotico-mudejar con bóveda de nervadura. Sufrió un incendio en 1772, que dio origen a su casi completa reconstrucción. En él residieron las hermandades del Gran Poder (finales del XV a finales del XVI y Soledad de San Lorenzo (mediados XVI). Actualmente residen en él las monjas Mercedarias de la Asunción. (Información y foto del convento, extraídas de la página: Conocer Sevilla.
www.artesacro.org)


Además de contar con una condición natural de buen constructor de grandes edificios en cuyas obras hizo cuantiosos gastos; entre otras muchas, el monasterio de Santiago de la Espada, en Sevilla. "En febrero de 1409, poco antes de su muerte, el maestre de la Orden Militar de santiago, don Lorenzo Suárez de Figueroa, obtenía la bula del Papa Benedicto XIII, que le otorgaba la facultad de fundar un monasterio sujeto a la Regla de su Orden en la ciudad de Sevilla. (Daniel Rodríguez Blanco, Dpto. Historia Medieval. Universidad de Sevilla)" donde luego mandaría que a su muerte, su cuerpo quedase allí descansando para la eternidad; cosa que no fue así, pues más adelante veremos dónde reposan sus restos en la actualidad. También edificó las casas y bastimentos de Llerena y de la Fuente del Maestre.

De cal y piedras que buscó caídas y desechadas, mandó hacer y reforzar casi la totalidad de las murallas, las torres defensivas y adarves de Xerez, cerca de Badajoz, y de Fuentes del Maestre.
Ordenó asimismo construir la torre del Homenaje, reparar y reforzar las murallas y torreones del castillo de Estepa perteneciente a la encomienda santiaguista de la que ha quedado dicho, era Maestre.
Durante su maestrazgo dispuso reparar muchas iglesias y capillas de la Orden, mandando poner en ellas algunas imágenes de alabastro.
Fue un hombre muy amante de sus familiares, pero especialmente lo fue con sus parientes gallegos, y siempre favoreció a muchos de ellos llegados hasta las tierras de Extremadura, “donde quedaron asentados con onrra i facienda”, “i en otros lugares del Reyno, donde oy día ay assaz memoria de sus linajes que son: los de Figueroa, i Mosqueras, i Moscosos, i Mexías, i los Docampo, i Villalobos, i Tordoyas, i otros muchos…”

________________________________________________

Continuará

martes, 8 de junio de 2010

"LA EDITORIAL MOGLIA EDICIONES,
CELEBRA SU 10º ANIVERSARIO"


"UNA INDUSTRIA EDITORIAL CON SELLO CORRENTINO"

***
(Artículo de prensa publicado hoy en "El Litoral" de Corrientes (Argentina), que me ha mandado la redactora del mismo, doña Moni Munilla, a quien agradezco su envío, y paso a publicarlo como noticia de interés cultural de la ciudad de Corrientes; hermana de Estepa)
Mis felicitaciones a Editorial Moglia, con el deseo de que cumpla muchas décadas más al servicio de la Cultura correntina, con la edición de mucho libros. ¡¡Suerte!!
___________________________

Con más de mil títulos en su catálogo, la firma Moglia Ediciones se apresta a celebrar hoy su 10º aniversario. Festeja una década de trabajo en la que ha reafirmado el compromiso primero de difundir la obra de autores locales, consolidándose como editorial a partir de una empresa con experiencia en el rubro comercial.
Organizada sobre la base del Centro de Copiado Moglia SRL, que en 1974 se instaló en Corrientes, brindando a sus clientes un servicio de excelencia que continúa a la fecha, la editorial ha publicado obras colectivas e individuales en todos los géneros: novela, ensayo, poesía, cuento e investigaciones históricas, médicas, etcétera.


Una extensa muestra de obras publicadas por Moglia Ediciones

La tarea de extensión cultural que Moglia Ediciones desempeña en la provincia, incluye el patrocinio y apoyo de actividades vinculadas a los libros. Ha publicado las ponencias de los Congresos de Historia de Corrientes, organizados conjuntamente con la Junta de Historia de la Provincia, desde la primera convocatoria en el año 2001, preparando su arribo a la localidad de Curuzú Cuatiá donde el 24 y 25 de este mes se realizará el Congreso ya programado.
Estas reuniones se ejecutan en forma alternada en Capital e Interior, por lo que ha acompañado a los investigadores en Corrientes, Paso de los Libres, Mercedes e Ituzaingó; de igual modo publica el Boletín Genealógico (Instituto Correntino de Ciencias Genealógicas) y la Revista “La verdad sin rodeos” (Instituto de Investigaciones Históricas y Culturales de Corrientes).
La historia de la Provincia es protagonista excluyente de los títulos seleccionados por el sello para editar en su fondo editorial. “La investigación histórica se ha visto impulsada en los últimos años, esto hace posible trabajar sobre el resultado, por lo que la combinación de investigadores-editorial, ha producido un gran número de nuevos libros, reestudiando nuestro pasado”, señala el responsable de la firma.
Moglia Ediciones es socio de la Cámara Argentina del Libro y como tal, ha participado tres años consecutivos en la Feria Internacional del Libro que se realiza en Buenos Aires, integrando un stand colectivo con el slogan publicitario “Moglia Ediciones, Autores Correntinos”. Estuvo además en la Expo Apicc correntina, entre 2006 y 2009 y recibió la distinción al Mejor Stand Comercial. Con motivo del Bicentenario, ha lanzado una convocatoria dirigida a autores locales, para formar parte de la “Colección Segundo Centenario”, dirigida por Dardo Ramírez Braschi, destacado investigador del medio.
______________________________________________
Moni Munilla
Diario "El Litoral"
Corrientes
(Argentina)

viernes, 4 de junio de 2010

DON LORENZO SUÁREZ DE FIGUEROA, MAESTRE DE LA ORDEN MILITAR DE SANTIAGO


CONSTRUCTOR DE LA TORRE DEL HOMENAJE
DEL CASTILLO DE ESTEPA
__________ (I) __________

Don Lorenzo Suárez de Figueroa, llamado “el Viejo”, nació en el año 1344 en la milenaria Torre de Figueroa, en las tierras propiedad de su familia, allá en la villa gallega de Abegondo, cerca de Betanzos transladándose después a Écija y luego a Extremadura. Otros datos, dicen de él que posiblemente naciera en 1345 en la ciudad de Écija (Sevilla), del matrimonio entre Gomez (o Gomes) Suárez de Figueroa, y Teresa López de Córdoba, señora de la Torre de Monturque.

Convento de San Marcos, en León, hoy convertido en hostal-parador de lujo. Sobre la moldura que se aprecia, hay una cenefa donde se encuentran esculpidas las efigies de reyes e importantes personajes de la historia. Una de ellas corresponde al maestre don Lorenzo Suárez de Figueroa

Este es el medallón esculpido y dedicado a don Lorenzo Suárez de Figueroa, el Maestre de Santiago.
(Fotografía encontrada en: elleoncurioso.blogspot.com, de donde la he tomado, y a cuyo Bloger le doy las gracias )
Se casó en dos ocasiones; la primera con Isabel Mexía, con quien tuvo dos hijos; Gomes Suárez de Figueroa e Isabel Suárez de Figueroa, y en segundas nupcias, lo hizo con María catalina de Orozco.
El día 28 de octubre del año 1387, en la ciudad de Mérida, fue elegido trigésimo quinto (otras fuentes dicen trigésimo segundo) Maestre de la Orden Militar de Santiago, sucediendo en el cargo a Garci Fernández de Villagarcía. Dicha Orden adoptó el patronazgo de Santiago El Mayor, considerando que fue el primer apóstol que vino a predicar el Evangelio a las tierras de Hispania.

Monasterio de Santiago de Uclés, sobre la localidad del mismo nombre, en la provincia de Cuenca. Lugar donde se hallaba la Casa Madre de la Orden.

Para su elección hubieron de reunirse los Trece Comendadores de la Orden –está constatado que el número de trece “freires” Comendadores, lo era en memoria de Jesucristo y sus Apóstoles- “poniendo a disposición de su Maestre incalculables riquezas, un considerable ejército y una influencia decisiva en todos los asuntos graves del reino”.
El hijo del Maestre electo, don Fernando IV Suárez de Figueroa, Obispo de Badajoz, actuando como comisario delegado representante del Papa, en nombre de éste, confirmó dicha elección en la ciudad de Guadalupe.
Se le dio el cargo de primer Maestre propietario de la Orden, en contra del voto de pobreza, por lo que don Lorenzo, solicitó al papa Bonifacio IX la reglamentación del usufructo de las propiedades agregadas a la Orden, la cual concedió el pontífice el día 31 de enero de 1393 -seis años después de su nombramiento como Maestre-, mediante la bula Bullarium Militiae Sancti Iacobi.
Esta licencia le permitió hacer mayorazgo en su hijo don Gómez, quien luego sería su sucesor y heredero.
“La jerarquía ocupada por don Lorenzo llevaba inherente la obtención de pingües beneficios, pues, según la bula anteriormente citada, disfrutaría la mitad de las rentas y frutos de la Orden. Aparte de todo ello, sus posesiones patrimoniales (…) y los bienes sitos en Ecija, de su mujer, Dñª. Isabel, así como sus servicios a la Corona, le permitieron conseguir numerosos territorios y villas por donación real o por compra a otras familias, a fin de fundar el gran mayorazgo que él mismo pudo conocer en vida”
Con este nombramiento pues, la Casa del Maestre tomó un auge inmenso, ya que el titular del maestrazgo se convierte entonces en una especie de pequeño monarca con súbditos casi propios y gran autoridad y poder de decisión para defender sus tierras -que como se ha dicho, cedió a su hijo-, y las de su Orden, cuyas fronteras por aquellos tiempos de guerras contra moros y portugueses había que proteger de sus amenazas.
En una Castilla donde reinaba don Juan I, monarca débil que dos años antes había sido derrotado por los portugueses en Aljubarrota. Un reino inmerso en divisiones internas, amenazado desde el exterior por los ingleses, portugueses, y los moros desde dentro, estos poderosos señores habían de defender sus territorios y fronteras siendo muy importante y decisiva su contribución militar a la Corona.



El estandarte de la Orden. Sobre un fondo de tafetán blanco, "el lagarto de Nuestro Señor Santiago". El vocablo lagarto se utilizaba para referirse a la Cruz rojo carmesí, insignia de la Orden.


A este rey poco enérgico, le sucedió su hijo, Enrique III, con tan sólo once años de edad. Los que ambicionaban más poder y posesiones, se preparaban para aprovechar las circunstancias de la debilidad del reino, pero don Lorenzo usando la prudencia y perspicacia que eran habituales en él, se previno contra cualquier eventualidad, y junto a otros poderosos señores del reino se presentó en Madrid ante el joven monarca don Enrique, y besó su mano en señal de reconocimiento y acatamiento como a su señor y rey, que en agradecimiento por su fidelidad y desinterés, el 26 de febrero de 1394, donó a don Gómez Suárez de Figueroa, hijo mayor y heredero de don Lorenzo, las villas de Feria, Zafra y La Parra, en tierras de Badajoz, en Extremadura.
En la Orden era conocido como “el buen” Maestre don Lorenzo Suárez de Figueroa; y el calificativo de “bueno” en el cargo y en su persona, le fue puesto por los muchos bienes y cosas que hizo y por la bondad que tuvo y siempre usó hasta su muerte.

Grabado de la batalla del Salado

Criado desde pequeño en el ámbito de la Orden Militar, su padre, don Gómez Suárez de Figueroa, era ya segundón de la casa, y por ello salió a probar suerte, y consiguió éxitos guerreando en las filas de la milicia del Señor Santiago, llegando a ser Comendador Mayor de León, con sede en Llerena. Luchó en la batalla del Salado de la que salieron victoriosos, muriendo después en las tierras de Arabiana junto al Moncayo, en el año 1359, en lucha contra el bastardo don Enrique.
De no haber muerto, los planes futuros que el rey tenía ordenados para este Comendador, eran hacerlo Maestre de la Orden.
Su contacto con la Orden Militar Santiaguista era por tanto muy estrecho, y esto hizo que don Lorenzo, el personaje que nos ocupa, se forjase desde joven como hombre de grandes virtudes y habilidad, siendo admitido para vestir el hábito de Santiago, cuyo traje de ceremonial era la capa blanca con una cruz de color rojo con la forma de espada, flordelisada en la empuñadura y los brazos.
Tras ser Comendador de Lobón, fue enviado a Mérida, y de allí a la encomienda de León. Después fue creciendo más en virtudes y merecimientos, y con la edad llegó a ocupar la dignidad de Maestre, que dirigió la Orden como buen caballero y religioso durante veintitrés años y nueve meses; tiempo bien gastado en los servicios a Dios, su rey y su Orden.
________________________________________________
CONTINUARÁ

miércoles, 2 de junio de 2010

LA TORRE DEL HOMENAJE
DEL CASTILLO DE ESTEPA
(y II)
_________________________

A dicha cámara se accede desde la antigua muralla por el viejo hueco con puerta de nueva construcción, y en ella existen dos ventanas orientadas una al norte y la otra al sur, reconstruidas en los años sesenta, y una estrecha tronera o saetera, que mira al oeste, dando vista al convento franciscano.

Tronera o saetera que hacia el oeste, vigila la zona más vulnerable del baluarte

Hace muchos años, -sin control ni criterio arqueológico alguno-, se practicaron en la Torre varias excavaciones y aperturas de huecos en sus muros para horadar su base maciza hasta la mitad, en busca, según decían, “de un tesoro que allí habían dejado enterrado los moros”.

Mayor error e ignorancia no cabe por parte de aquellos buscadores de tesoros, pues dicho baluarte se construyó como se ha dicho antes, cuando Estepa ya pertenecía a la encomienda santiaguista, que custodiaba nuestra villa y castillo en esta zona de frontera entre los reinos de Castilla y Granada en la llamada banda morisca; variable franja territorial que aproximadamente corría desde castillos de la actual provincia de Cádiz, hasta nuestras tierras pasando por las de Córdoba y Jaén. La evidencia confirma dicho error, pues hasta ahora, nada se ha hallado de caudales ni joyas; al menos dentro de la Torre, donde sería impensable que el bueno de don Lorenzo o cualquier otro caballero habitante de la fortaleza medieval, escondiera riqueza alguna ni cosa de gran valor y provecho.
En época reciente se han llevado a cabo varias actuaciones de reparación. Durante los años 1974,75, 85, 86 y 2002 se han realizado intervenciones de restauración principalmente para aminorar el proceso de deterioro de tan formidable Torre.



Vista desde arriba, la angosta escalera por la que se sube a la cubierta



Entre otras, arreglo de la cubierta para eliminar la filtración de agua que producía la humedad y las manchas de la cúpula, reparación interna y reconstrucción de los ventanales, construcción de una torreta con nuevas y cómodas escaleras más seguras de acceso al monumento, y rehabilitación de la escalera interna que sube a la azotea, etc. etc.
En sus más de seis siglos de existencia, nunca se había hecho nada semejante en materia de reparación, como lo realizado por distintos gobiernos municipales desde hace casi cuarenta años, hasta la fecha de hoy.

En esta ocasión, los trabajos irán encaminados a realizar una intervención de conservación, restauración y rehabilitación de la cubierta, y la construcción de un pretil que permita el acceso a lo más alto del monumento, y pueda ser visitado con seguridad. Exteriormente, se está llevando a cabo una limpieza general superficial de la suciedad, mediante chorros de agua a presión controlada, para pasar después a otra actuación de carácter conservativo y de consolidación y reintegración con morteros especiales de los elementos que por su importancia en la geometría general, sean indispensables para el edificio, aplicando siempre un criterio de diferenciación con el original. Se realizarán también actuaciones sobre los mechinales, agujas, interior de la cámara octogonal etc.

Dicen los viejos papeles de antiguos historiadores, que sobre la portezuela de entrada a la cámara de la torre, vieron que había una inscripción -desaparecida, aunque existe el hueco, como se aprecia en la foto-, mandada escribir por quien dispuso construirla. Y como quiera que las gentes de aquél tiempo vieran la magnífica obra de fábrica de la torre defensiva, muchos se preguntarían cuál sería el alto costo de la misma. Por lo que para satisfacer la curiosidad del vulgo y acallar sus comentarios, el Maestre hizo escribir una célebre leyenda –enormemente ingeniosa, pero poco aclaratoria-, muy conocida por los estepeños y por aquellos interesados en la historia de nuestra ciudad, y que decía así:


“Esta Torre mandó facer
Lorenzo Suárez de Figueroa
Maestre de Santiago.
Quien quisiere saber lo que
costó, faga otra como ella
y saberlo ha”


Ésta, sería una magnífica ocasión, aprovechando las obras de restauración que ahora se hacen, para restablecer sobre la puerta de entrada la desaparecida placa, o grabado en la piedra, con dicho enunciado.

Cara norte. Estado actual de la torre, rodeada de andamios para su restauración exterior


Cuando el proceso de restauración que se está haciendo haya concluido, seguro que nuestra emblemática y admirada Torre de la que nos sentimos tan orgullosos, va a lucir un espléndido aspecto y se mostrará desde entonces, mucho más rejuvenecida, “guapa” y esbelta ante nuestros ojos, para seguir siendo la novia enamorada, y silenciosa guardiana del tranquilo sueño nocturno de Estepa, y la calma de sus días, por muchos siglo más de vida en la Historia venidera.
Los restos del Alcázar–Palacio y la Torre del Homenaje, fueron declarados BIENES DE INTERÉS CULTURAL EN 1985.